Los motores hoy pueden ser eléctricos o de combustión interna. Y la mayoría de los que vemos son de la segunda clase. En el motor de combustión interna se hace explotar un líquido -realmente un gas- en una mezcla ideal de combustible y aire tal que éste empuja un pistón que sube y baja constantemente. Una biela convierte ese movimiento rectilíneo en circular uniforme y así pasa a través de una serie de engranajes -los cambios- que aumentan el torque de salida o lo disminuyen para dar más velocidad o más fuerza. El diámetro del pistón es lo que se llama cilindrada. Así, un auto de 1.0 litros tiene pistones que desplazan esa cantidad de volumen por cada giro completo del cigüeñal.
Consideraciones:
a. Los motores de combustión interna literalmente explotan una mezcla que empuja un pistón que mueve un cigüeñal, que mueve unos engranajes que mueven el coche.
b. Cada cilindro desplaza un volumen al que se llama cilindrada.
c. El líquido combustible debe poseer esa propiedad intrínseca, por eso no podemos prender este tipo de motores con agua, aunque es un decir pues ya hay motores de hidrógeno.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario